Trucos para psicotécnicos: el abecedario
Uno de los ejercicios clásicos en las pruebas psicotécnicas son las series alfabéticas o alfanuméricas, si además de letras la serie se construye con números.
Este tipo de ejercicios requiere una especial habilidad para «contar» las letras del abecedario, para ser capaz de identificar cuál es la lógica que sigue la serie presentada.
Además de para las series, tener destreza con el conteo de letras nos puede ayudar con otro tipo de ejercicios: ordenar palabras, descubrir errores en orden alfabético de términos o series especiales, que no siguen con la estructura tradicional, pero que en esencia exigen esta competencia para su resolución.
Como hemos visto, conocer el abecedario -por muy obvio que pueda parecer- es una competencia necesaria para enfrentarnos a cualquier prueba psicotécnica.
Con este artículo queremos mostrar algunas estrategias para ganar en velocidad y eficacia en tareas que requieran de la capacidad de ordenar letras por orden alfabético.
Ruleta del alfabeto
Esta estrategia te permite ser más eficiente en tareas y series que se construyen con las letras finales e iniciales del alfabeto.
Al tener visualizado este orden, es mucho más ágil el proceso de identificación de letras y la secuencia que las separa.
La idea es que veamos la secuencia como un continuo, identificando letras contrapuestas y letras cercanas, que antes veíamos como alejadas, al tener la costumbre de «recitar» el abecedario de manera lineal.
Codificación letra-número
Otra vía para lograr mayor velocidad de ejecución en este tipo de ejercicios, pasa por tener memorizada la equivalencia entre letra y número de posición que tiene en el alfabeto.
De este modo, podemos convertir la serie de letras en una serie de números, que habitualmente es más sencilla de ejecutar, pues tenemos más costumbre de realizar operaciones matemáticas (sumas, restas, multiplicaciones y divisiones) con números.
Para aplicar esta estrategia más eficientemente, recomendamos renombrar las letras, escribiendo encima de cada letra, su correspondiente número según su posición. Esto permite ahorrar, rendimiento mental y lograr más eficiencia.
Agrupación de letras
Otra manera de preparar la memorización del abecedario pasa por aprenderlo en agrupaciones de 5 letras, a modo de «biblioteca mental», para lograr una mejor visualización de conjunto y un conteo más rápido.
La gran ventaja de esta estrategia es que nos ayuda a reconocer posibles lógicas en la construcción de secuencias, ya que podemos ver series de diferentes grupos, y saber de inmediato que entre ellas median más de 5 posiciones.
En este punto, podemos recomendar una agrupación por cuadrantes, combinando esta estrategia con la de ruleta del alfabeto, que nos permitirá identificar letras que puedan encontrarse en 4 posibles grupos (cuadrantes) y realizar un tanteo rápido de número de posiciones que las separan.
Como ves, tienes más de una forma de memorizar el alfabeto y convertir unos ejercicios que aparentemente son más complejos en unas series numéricas, pero de solo 28 números.
Además, estas ideas las puedes aplicar a otro tipo de series más o menos comunes, como es el caso de las series de dominó o de bajaras de cartas.
Finalmente, queremos aclarar unas pequeñas pautas para que puedas resolver este tipo de ejercicios aún más rápidamente y minimizando posibles errores:
Escribe todo lo que puedas
No se trata de «pintarrajear» el cuestionario (esto podría invalidar la prueba incluso), pero sí puedes realizar pequeñas anotaciones y operaciones en la hoja de los enunciados de las preguntas.
Si te encuentras una tanda de series alfabéticas, no dudes en escribir el abecedario entero y así poder hacer los «saltos» sobre el papel, sin malgastar rendimiento mental, haciéndolos de cabeza y evitando fallos indeseados.
Ten presente el número de letras con las que podemos jugar
Lo habitual es que en las instrucciones se te especifique, si se tendrán en consideración para elaborar la secuencia, las letras dobles como la LL o la W.
Atiende a las instrucciones o pregunta en caso de duda, pues esto podría alterar el conteo y hacer las operaciones de manera incorrecta.
Cuenta saltos o posiciones…pero no mezcles
Un error muy frecuente es empezar contando posiciones y acabar contando los saltos. Para aclarar un estilo de conteo u otro te ponemos un ejemplo:
De la letra A a la letra E: A-B-C-D-E
- 4 saltos: son las líneas entre letras.
- 3 posiciones: son las letras que saltamos (B-C-D).
Puede parecer algo lógico y sencillo, pero ahora que tienes clara esta información, ya no habrá confusión posible 😊
Quedamos a tu entera disposición, por si podemos ayudarte con cualquier duda… ¡TODO POR LA PLAZA!